Ayer quedamos, para despedirnos, con Yago en la Plaza de la Leña. En principio quedamos donde era «Casa Filgueira» y es que hacía tanto tiempo que no me dejaba caer por allí que no me había enterado de que ahora ahí esta el «Loaira», por cierto bonito nombre.
Indagando me enteré de que Loaira es un nombre gallego cuyo significado es «el primer rayo de sol que sale tras la lluvia», precioso ¿verdad?
Pues el caso es que hacía una noche bastante calurosa, así que nos sentamos en la terraza para tomar unos vinos y mientras ojee la carta, bastante original y extensa con productos de calidad principalmente procedentes de la tierra y de las rías gallegas, así que tuvimos que pedirnos algo para probar.
Como, en principio, la idea no era cenar nos pedimos dos tapas por eso de acompañar el vino. De primero tabla de quesos gallegos artesanos, muy ricos, uno ahumado, otro de Arzúa y la sorpresa la dió el tercero en discordia «queso parmesano gallego» según nos explicaron se diferencia «entre otras cosas supongo» del parmesano en el tiempo de curación, mucho menor en éste, tan sólo 6 meses frente a los 18 habituales en los quesos de este tipo, evidentemente más suave que el parmesano al que estoy acostumbrada pero con un cierto regustillo en el paladar al final. Nos los sirvieron acompañados de mermelada de ciruela que combinaba muy bien.
Como segunda tapa croquetas de Centolla, muy ricas y con verdadero sabor a Centolla.
La verdad es que me planteo volver otro día, me gusto mucho.
Dónde: Plaza de la Leña, 2. Pontevedra.
isabelandia 