Neptuno (Poseidón en la mitología griega), hijo de Saturno y Ops, hermano de Júpiter y Plutón, gobierna todas las aguas y mares.
Eligió el mar como morada y su reino alberga castillos dorados. Con su tridente agita las olas, hace brotar fuentes y manantiales y su ira origina los seísmos o terremotos.
Es un dios de carácter peligroso e inestable que con sus emociones pueden provocar desde terribles tempestades hasta olas tranquilas y pacíficas, por lo que no es aconsejable provocarlo.
Sostiene la Tierra, rodeada por el océano, soportando su peso, da forma a las costas, arranca trozos de montañas formando acantilados y acaricia el litoral dejando suaves playas y abrigadas bahías en las que los barcos encuentran refugio.
Cabalga las olas sobre caballos blancos y todas las criaturas de las aguas le deben obediencia. Además de las sirenas, nereidas , oceánides y tritones, le deben pleitesía las ninfas, ondinas y náyades de los lagos, de los ríos y de las fuentes, ya que son parte de su reino, su poder llega a los confines del mundo.
Se representa con barba y majestuosa figura, con un tridente en la mano y a menudo acompañado de un delfín. Puede ir montado en un brioso carro tirado por seres marinos y rodeado por tritones que anuncian su llegada con un instrumento musical de fuerte sonido.
Nuestro particular e imponente Neptuno está en el Paseo Marítimo de Moaña (Pontevedra), es obra del artista Manuel Varela, y representa en granito una figura corpulenta con un tridente de bronce en su mano, pero lo que parece Neptuno es en realidad un “FISGÓN”, es decir, un marinero dedicado al arte de la pesca conocido por “fisga” (tridente) típico en esta localidad.
isabelandia 